Las calorías de mantenimiento son la cantidad de energía que nuestro cuerpo necesita para mantener sus funciones vitales en reposo, es decir, mantener el peso actual sin perder ni ganar kilos. Este número varía según la edad, el sexo, la altura, el peso y el nivel de actividad física de cada individuo.
Calcular las calorías de mantenimiento es fundamental para poder llevar una dieta equilibrada y saludable, ya que si consumimos más calorías de las que nuestro cuerpo necesita, engordaremos, y si consumimos menos, adelgazaremos.
Existen diferentes fórmulas para calcular las calorías de mantenimiento, pero una de las más utilizadas es la fórmula de Harris-Benedict. Esta fórmula tiene en cuenta el sexo, la edad, la altura y el peso de una persona para determinar su tasa metabólica basal (TMB), que es la cantidad de calorías que el cuerpo necesita en reposo para mantener las funciones vitales.
Una vez calculada la TMB, se debe tener en cuenta el nivel de actividad física de la persona para determinar las calorías de mantenimiento. Por ejemplo, si una persona es sedentaria, su nivel de actividad física es bajo y, por tanto, necesitará menos calorías de mantenimiento que alguien que hace ejercicio regularmente.
Es importante recordar que las calorías de mantenimiento no son un número fijo, ya que el metabolismo de cada persona es único y puede variar a lo largo de la vida. Por ello es recomendable revisar periódicamente la cantidad de calorías consumidas y ajustarla según las necesidades de cada momento.
En definitiva, las calorías de mantenimiento son la cantidad de energía que nuestro cuerpo necesita para mantener su peso actual. Calcular esta cifra con precisión es fundamental para mantener una dieta sana y equilibrada y evitar aumentos o pérdidas de peso no deseados. Si tienes dudas sobre cuántas calorías necesitas, es recomendable consultar a un profesional de la salud para que te ayude a determinar la cantidad adecuada para ti.